Casa pasiva: qué es y cómo funciona

26 de diciembre de 2022

Ahora mismo hay una gran preocupación por la eficiencia energética, aunque esto no es nada nuevo y eso lo podemos ver con el surgimiento de la casa pasiva y el estándar Passivhaus, el cual nació en Alemania en los ya lejanos años 90.

Nosotros podemos ayudarte a la hora de construir estas viviendas, pues suministramos a los profesionales de la construcción el aislamiento necesario para las casas pasivas, el cual es uno de sus elementos imprescindibles.

Qué es una casa pasiva

Con el fin de entender qué es una casa pasiva, hay que hablar del uso de la energía que se hace en el inmueble. Dependiendo de la latitud a la que vivamos, necesitaremos energía para calentar la vivienda en invierno y enfriarla en verano.

Se suele emplear una cantidad muy elevada, y contra esto lucha una casa pasiva, ya que a la hora de cumplir el estándar Passivhaus, la vivienda debe conformarse con un consumo de calefacción y refrigeración de menos de 15 kW por metro cuadrado al año.

Cuáles son sus elementos imprescindibles 

A la hora de construir una casa pasiva, estas deben tener en cuenta estos cinco elementos fundamentales.

Aislamiento térmico

Aquí es donde entramos nosotros, con nuestro aislamiento de poliestireno expandido que se puede utilizar en techos, suelos, paredes, tejados e incluso en los forjados gracias a los casetones y a las bovedillas de este material, sin olvidar que vendemos planchas de poliespan para el sistema de fachada SATE.

La idea es que toda la envoltura exterior de la casa esté aislada de manera excelente, lo que se puede conseguir con nuestros materiales de poliestireno.

Ventanas y puertas eficientes

Cuando los constructores hablan de eficiencia, casi siempre se refieren a ventanas con rotura de puente térmico, pero aquí se va más allá, con cristales que pueden ser triples y de baja emisividad. Otra medida es el sellado de las ventanas y las puertas, puesto que no debe entrar aire por ninguna rendija.

Ventilación forzada

Entre las particularidades del diseño de las casas pasivas, está el que no se abran las ventanas a la hora de ventilar, sino que esto se hace a través de un intercambiador de calor, que mezcla el aire caliente con el frío.

Es casi hermética

Derivado de lo anterior, construir un inmueble de este tipo tiene poco que ver con una casa de las de siempre, puesto que la casa pasiva debe ser prácticamente hermética. De hecho, se tolera una fuga de aire de menos del 0,6 % del volumen total en cada hora.

Hay que controlar los puentes térmicos

Los puentes térmicos más conocidos son los de las ventanas, pero no hay que olvidar los de las puertas o incluso los de los muros, que además casi siempre son los responsables de la temida humedad por condensación que aparece en las paredes.

En el caso de los puentes térmicos de paredes, suelos, tejados, etc., estos se evitan con el aislamiento que vendemos a los profesionales de la construcción.

Cómo funciona una casa pasiva

El funcionamiento de una vivienda pasiva se basa en la forma en la que se construye, aislándola lo máximo posible, pero usando la energía que hay fuera con el fin de conseguir una temperatura adecuada.

Apenas usa calefacción o aire acondicionado

Su gran ventaja es que apenas necesita emplear aire acondicionado o calefacción, solo en algunos momentos del año muy puntuales, ya que tanto a la hora de calentar como para enfriar, siempre que es posible, emplea el intercambio de aire.

Además, se puede asociar con energías renovables como la aerotermia, las placas solares, etc., por lo que el consumo eléctrico del exterior para la climatización será nulo.

Se juega con el sol

Parece que las viviendas actuales se han olvidado del sol, pero esto no pasa en el diseño de las casas pasivas, que tienen muy en cuenta la orientación, pues la idea es que el sol caliente en invierno, pero que no lo haga durante el verano.

Así, a la hora de construirlas, en la cara que da al sur, se emplean todo tipo de elementos como grandes voladizos, pérgolas, lama, vegetación, etc., que protegen esta cara de la radiación solar veraniega.

Recupera sistemas de construcción antiguos

Con la posibilidad de obtener energía barata, algo que parece que ya se ha terminado, las construcciones dejaron a un lado los sistemas antiguos, aquellos que los viejos arquitectos usaban cuando no se podía encender la calefacción con un botón.

Este tipo de construcción los recupera, utilizando algo tan sencillo como pintar la fachada de tonos claros con el fin de que el sol se refleje en ella en verano, evitando que caliente demasiado la casa.

La casa pasiva se ha visto como algo extraño y caro, pero cada vez es más popular y los clientes la demandan más. Nuestros aislantes de poliestireno son fundamentales a la hora de construirla, ya que con ellos se puede aislar por completo del exterior de una forma muy sencilla y económica.